El profesor Dionisio nos sorprendió el lunes 27 con una magnífica colección de setas que había recogido durante el fin de semana. A mí me parece un milagro que alguien pueda distinguir entre setas comestibles y venenosas, que sepa clasificarlas y ponerles nombre científico.
En fin, un mundo mágico y misterioso sobre una mesa en el hall del instituto, que nos invita a pensar un poco más en el campo que nos rodea y en nuestra maravillosa sierra.
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